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Tratamientos y tips para cuidar la cicatriz de una cesárea
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La cesárea es cada vez más usado por los profesionales, y da paso a uno de los momentos más privilegiados que las mujeres pueden vivir… la llegada de un hijo. Se trata de una nueva etapa marcada por cicatrices que pasan a segundo plano debido a que el amor que nace dentro de la madre en el mismo instante es infinito.
A medida que pasa el tiempo, es normal que las mamás quieran recuperar su figura y conseguir verse igual que antes de iniciar el embarazo. Es vital que las mujeres luego de un parto vivan conformes con su cuerpo en general. Por eso, muchas mujeres se ven en la necesidad y el deseo de corregir las cicatrices de sus cuerpos. Una de las que más preocupa a las mujeres es la cicatriz de cesárea, ya que, a pesar del buen trabajo que hacen hoy los médicos en una operación de parto, no deja de ser una cicatriz, además de tener dimensiones bastante amplias.
La cicatriz de cesárea
Hoy por hoy, las cicatrices de cesárea, a pesar de ser un tanto largas, son muy finas y discretas, porque se realizan vía suprapúbica de forma horizontal sobre el pubis. Y lo mejor de todo es que la incisión se practica en la llamada área del bikini. De esta manera queda oculta por la ropa interior o la parte inferior del bikini.
En la mayoría de los casos, la cicatriz de una cesárea es estéticamente maravillosa, por ser prácticamente invisible. Pero cuando una intervención tiene carácter de urgencia y, dependiendo de cómo sea tal urgencia, el cirujano no podrá primar la estética de la paciente por la salud. Así que es posible que tenga que realizar una cicatriz tipo laparotomía media, es decir, vertical; o que no quede lo suficientemente baja en el caso de la horizontal. En ambas situaciones, la cicatriz sí será visible e imposible de esconder, porque llegará hasta la mitad del abdomen (de forma vertical) o por encima de la línea del bikini (la cicatriz horizontal).
Conjuntamente, están los puntos de sutura para cerrar la herida, el cirujano puede utilizar hilo quirúrgico o grapas. Las grapas de hoy en día no son como las de antes, que dejaban muchas marcas. Las actuales dejan el mismo aspecto que los puntos.
¿Existen complicaciones con la cicatriz de cesárea?
Todo el proceso no está exento de complicaciones, podría la cicatriz no evolucionar prósperamente a pesar de los máximos cuidados. Estos riesgos asociados son: la paciente puede sufrir hemorragias, infecciones, intolerancia al material de la sutura, dehiscencia (la cicatriz se vuelve a abrir), entre otros.
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Sumadas las complicaciones postoperatorias, también pueden producirse problemas de cicatrización que directamente tiene relación con su aspecto. La cicatriz de cesárea puede sufrir una hipertrofia, quedar adherida (hundida hacia adentro), ensanchada, con marcas visibles de sutura, incluso provocar un exceso de piel que quede colgando. Si suceden algunos de estos escenarios, podemos recurrir a varios tratamientos que existen en la actualidad para la corrección y mejora de cicatrices, los que son muy demandados y efectivos.
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Los cuidados fundamentales para una cicatriz de cesárea
Evidentemente es esencial mantener la cicatriz limpia y seca las primeras semanas. Para eso, se debe lavar la herida con agua y jabón neutro, y hacerlo con mucho cuidado los primeros días. También, se debe aplicar un antiséptico (como el yodo o la clorhexidina) y después cubrirse con un esparadrapo hipoalergénico y transpirable (muy importante esto último).
Es necesario mantener reposo durante los primeros días y no hacer grandes esfuerzos durante unas semanas hasta que la herida haya cicatrizado perfectamente. De la misma manera, es recomendable utilizar una faja de compresión al menos un par de meses, esto aplacará el dolor abdominal.
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Hay que tener en consideración que el doctor tratante te dará todas las indicaciones de la forma correcta para cuidarte. Si en cualquier momento notas algún malestar o un aspecto anormal, debes inmediatamente solicitar agenda a tu médico. El tiempo estimado de recuperación de una cicatriz de este tipo es alrededor de los seis meses.
Tips para mejorar el aspecto de la incisión
Para que la piel se recupere por completo el proceso es bastante largo, por eso los cuidados constantes y paciencia de la paciente son fundamentales, para lograr que la cicatriz quede lo más disimulada posible. A continuación algunas prácticas que le ayudarán:
Aceite de rosa de mosqueta. Ampliamente utilizado por sus propiedades hidratantes y regeneradoras muy efectivos, debido a su alto contenido en antioxidantes y vitaminas que favorecen la formación de colágeno.
Parches de silicona. Ayudan a ejercer presión sobre la cicatriz y actúan como apósito.
Masajes. Son realmente beneficiosos, ya que evitan que la cicatriz se quede adherida a los tejidos profundos y que se forman edemas, a la par que mejoran la circulación de la zona. Son masajes especiales que deben ser realizados por un profesional y cuando el médico lo autorice.
Ejercicio físico. Beneficios siempre y cuando se tenga el permiso médico. Lo ideal es hacer ejercicios que no interfieran fuertemente en la zona abdominal.
Tratamientos de corrección de cicatrices
Aunque no es común, es posible que la cicatriz de cesárea definitivamente no evolucione de forma normal. En este caso la paciente puede recurrir a varios tratamientos médicos para mejorar su aspecto.
Dermoabrasión. Indicada cuando los músculos abdominales tienen buen tono y existe poca flacidez cutánea. Con un instrumento quirúrgico, se levanta el tejido cicatricial y se trata la zona con antibióticos y aceites minerales que evitan la formación de nuevas cicatrices.
Láser. La acción del láser en la zona de la cicatriz activa el metabolismo de los fibroblastos, células que son responsables de la formación de colágeno. De esta manera, el aspecto de la cicatriz mejora considerablemente.
Liposucción y abdominoplastia. Recomendada en aquellos casos en los que los músculos presentan relajación y existe evidente exceso de tejido cutáneo. Se elimina el exceso de grasa de la paciente quedando la piel de la zona del abdomen muy joven. Si la paciente quiere ser madre nuevamente, se recomienda que no se realice la operación si no luego del parto.
Corticoides. Se inyectan en la cicatriz y reducen el exceso de formación de los factores que intervienen en el proceso cicatricial.
Crioterapia. Se aplica nitrógeno líquido en la cicatriz que consigue reducir el tamaño por vasoconstricción y anoxia (falta de oxígeno en la zona).
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